jueves, 28 de mayo de 2015

¿Te pones en los zapatos del otro?


Un simple cuento que te enseña qué es "la empatía"

Tommy solo tenía seis años y quería tener un reloj de pulsera.
Cuando se lo regalaron por fin, en Navidad, estaba impaciente por enseñárselo a su mejor amigo, Billy.
La madre de Tommy le dio permiso, y cuando su hijo salió de casa le hizo esta advertencia:
- Tommy, ahora llevas tu reloj nuevo, y sabes leer la hora. Ve a casa de Billy llegas andando en dos minutos; así que no tienes excusa para llegar tarde a casa. Vuelve antes de las seis para merendar.
- Sí, mamá -dijo Tommy mientras salía corriendo por la puerta.
Dieron las seis, y ni rastro de Tommy. 
A las seis y cuarto no había aparecido todavía, y su madre se irritó. 
A las seis y media seguía sin aparecer, y se enfadó. 
A las siete menos diez, el enfado se convirtió en miedo. 
Cuando se disponía salir a buscar a su hijo, se abrió despacio la puerta de la calle. Tommy entró en silencio.
- ¡Ay, Tommy! -le riñó su madre-. ¿Cómo has podido ser tan desconsiderado? ¿No sabías que yo me iba a preocupar? ¿Dónde te has metido?
- He estado ayudando a Billy... -empezó a decir Tommy.
- ¿Ayudando a Billy?, ¿a qué? -le gritó su madre.
El pequeño empezó a explicar:
- A Billy le han regalado una bicicleta nueva por Navidad, pero se cayó de la acera y se rompió y...
- ¡Ay Tommy! -le interrumpió su madre-, ¿qué sabe de arreglar bicicletas un niño de seis años? 
Por Dios, tú....
Esta vez fue Tommy quien interrumpió a su madre.
- No mamá. No quise ayudarle a arreglar su bicicleta. 

Me senté a su lado y le ayudé a llorar...

¿Por qué mentimos?




  

«Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá.»

El ministro de Propaganda Joseph Goebbels fue un personaje clave del régimen, ideólogo y estratega de la mentira. El epílogo de su vida fue tan perverso como el prólogo. Horas antes de que los soviéticos llegaran al bunker donde se escondía, envenenó a sus seis pequeños hijos con ayuda de su mujer, Magda, antes de suicidarse junto con ella. Nadie olvidará su frase célebre: “Miente, miente, miente que algo quedará, cuanto más grande sea una mentira más gente la creerá.”
Todos mienten un poco, con mentiras piadosas o exagerando un poco la verdad. Los mentirosos patológicos mienten siempre. Viven en una realidad que construyen con sus mentiras compulsivas.
¿Qué buscan? Enmascarar la baja autoestima.
¿Cómo detectarlos?
  • Al comparar y contrastar los detalles pequeños, suelen no coincidir.
  • Tratan de evitar los problemas y no asumir la culpa por algo malo que hayan hecho.
  • Buscan ser el centro y agrandan la mentira para continuar en el foco de admiración.
  • Sienten que sus problemas son superiores a los de todos los demás.
  • Van por el mundo diciendo su versión a todos y a cualquiera, exagerando los detalles para ganarse la aprobación.
  • Necesitan sentirse importantes, superiores. Al escuchar un logro, ellos darán un relato superador.
  • Se sienten aburridos cuando el drama no ronda sus cabezas. Entonces construyen mentiras para inspirarse o entretenerse.
  • Sienten que no son importantes por ser quienes son, por lo que necesitan inventar logros y eventos para ser valorados.
  • Suelen tener alguna adicción o hábito secreto que necesitan esconder.
¿Cómo reaccionan al ser descubiertos?

  • Generan una reacción extrema, poniéndose a la defensiva o buscando otro culpable.
  • Fabrican rápidamente otra mentira para cubrir la anterior.
  • Tienden a buscar venganza tomando represalias o hacen una escena con un ataque de llanto o enojo.
  • Tienen dificultades para sostener una vida consistente. Cambian con frecuencia de trabajo, amigos y pareja. Son rechazados por la familia.
  • Atraen nuevas relaciones pero son incapaces de mantenerlas.

miércoles, 6 de mayo de 2015

Seis ideas para ser más felices


  
Científicos de la Clínica Mayo, en Estados Unidos, armaron una guía que de seguirla, afirman, nos haría más satisfechas y hasta dormiríamos mejor. Consejos para promover la gratitud.

Ser agradecido tiene su premio. Quienes del gracias no hacen una mera cuestión formal, si no un estilo de vida son más felices, mantienen relaciones más positivas con su entorno, sienten mayor satisfacción y hasta duermen mejor.

No se trata sólo del agradecer cuando se recibe un regalo, una ayuda o un servicio. El concepto de gratitud que redunda en mayor sensación de bienestar es mucho más amplio y “se enfoca en notar y apreciar los aspectos positivos de la vida”, aún cuando esta tenga imperfecciones, según un reciente artículo de la Mayo Clinic Health Letter, una publicación de la Clínica Mayo, de Estados Unidos.

La publicación se centra en las conclusiones del trabajo de Amit Sood, profesor de Medicina del centro de Rochester, Minnesota, y autor de varios libros dedicados a dar pautas sobre cómo entrenar al cerebro para disminuir el estrés, mejorar la resiliencia (la capacidad de las personas para sobreponerse a momentos dolorosos y situaciones adversas) y vivir en forma positiva.

Sood que, entre otras publicaciones es autor de la Guía para vivir libre de estrés, da algunas sugerencias para promover y practicar la gratitud a diario:

1- Empezar el día agradeciendo: Arrancar la jornada pensando en cinco personas por quienes siente gratitud. Se inicia de un modo más positivo cuando uno empieza con pensamientos de gratitud.

2- Agradecer por cosas simples: Prestar más atención a cosas que uno da por sentadas como la electricidad, el agua potable, la ropa limpia y una taza de café.

3- Buscar lo positivo en lo negativo: Ver los problemas como fuerzas necesarias y enfocarse en lo realmente importante. Agradecer por tener una mente flexible que le permite aprender de las adversidades y crecer como persona.

4- Reconocer las riquezas propias: Cuando se sienta triste, concéntrese en las cosas buenas que tenga, como su salud, su casa, su libertad, un trabajo y seres queridos.

5- Llevar un diario sobre la gratitud: Anotar las personas y las cosas por las que siente agradecimiento antes de dormir, para que los últimos pensamientos antes del descanso sean positivos. Cuando tenga un día complicado, revise el diario.

6- Agradecer: Exprese su agradecimiento a los demás con palabras y acciones, en forma personal o por mensaje.

martes, 5 de mayo de 2015

El despertar



Si ya has despertado y ves como duermen los demás a tu alrededor, entonces camina de puntillas, respeta su sueño y descubre la perfección de sus propios tiempos, así como fueron perfectos los tuyos. 
Cuando ellos abran sus ojos, el fulgor de tu brillo les ayudará a despertar sin necesidad de que hagas nada. 
Si aún duermes, relájate y disfruta tu sueño, estás siendo mecido y cuidado. 
Despertar no es un acto de magia, aunque llena de magia tu vida. 
Despertar no tiene nada que ver con el mundo externo, aunque todo lo que te rodea parece tener un nuevo brillo. 
Despertar no cambia tu vida, si bien sientes que todo ha cambiado. 
Despertar no borra tu pasado, pero al mirar atrás lo percibes como la historia de alguien muy querido que aprendió muchas cosas, pero sientes que ese alguien ya no eres tú. 
Despertar no despierta a tus seres queridos, pero ellos se ven más divinos ante tus ojos. 
Despertar no sana todas tus heridas, pero ellas dejan de gobernarte. 
Despertar no te hace más popular, pero ya no volveras a sentirte solo. Despertar no te embellece ante los demás, pero te hace perfecto ante tu propia mirada. 
Despertar no te da más poder, pero descubres el poder que tienes.
Despertar puede que no disuelva los barrotes de tus cárceles, pero te da la libertad de ser tú mismo. 
Despertar no cambiará el mundo, al menos de repente, pero te cambiará a ti.
Despertar no te quita responsabilidad, muy por el contrario, te da conciencia de las consecuencias de tus actos y elecciones. 
Despertar no te hace tener siempre la razón, más bien ya no sientes la necesidad de tenerla. 
Despertar es amarte a ti mismo, con tus límites y con tus experiencias, es amar al otro como parte de tu ser y es amar a la existencia. 
Permítete disfrutar de la experiencia de ser ese Ser maravilloso que ya eres.
Tu vida es un Acto Sagrado pues es la creación del Dios que hay en ti, que eres tú


Depak Chopra

sábado, 2 de mayo de 2015

La sandalia


En cierta ocasión, al tomar un tren en el interior de la India, Gandhi tropezó con el escalón y se le cayó la sandalia del pie derecho.
En ese mismo instante, el tren se puso en marcha, y no pudo recuperarla.
Delante de todos los presentes, se quitó la sandalia del pie izquierdo, y la tiró por la ventana.
“¿Por qué ha hecho eso?,” le preguntó un oficial inglés.

“Una sandalia sola no sirve para nada, ni a mí ni a quien se encuentre la que se me ha caído. Ahora, por lo menos esa persona se podrá quedar con el par”.

Todos desean felicidad



El deseo es aquello que nos atrae entre nosotros. Deseo de paz mundial o deseo de guerra. Deseo de pizza o deseo de una ensalada. No importa cuán profundo o trivial, los deseos humanos son nuestro vínculo común.

Todos desean felicidad; nadie desea sufrimiento. No obstante, con frecuencia confundimos la búsqueda de la felicidad de alguien (la evasión del sufrimiento) con una actitud “anti-yo”. ¿Cuán a menudo, por ejemplo, has pensado que un amigo, un maestro o un familiar estaba molesto contigo porque te estaba prestando menos atención de lo usual, sólo para después descubrir que había pasado por una tragedia personal (tal vez alguna muerte, una enfermedad o una riña familiar) que, simplemente, causó que se apartara un poco? No sólo de ti, sino de todos; hasta que se sintiera estable nuevamente.

Cuando tomamos de forma personal las acciones de otras personas, es nuestro ego hablando; diciéndonos que somos el centro del universo, que todo lo que ocurre en nuestra vida gira alrededor de nosotros.


Recuerda, tu ego es la cortina que te separa del ámbito del 99% de la realización. Cuanto más lo doblegues, más se abrirá la cortina y más pronto se cumplirán tus deseos.

Si


Si yo cambiara mi manera de pensar hacia los otros.... los comprendería.
Si yo encontrara lo positivo en todos.... con qué alegría me comunicaría con ellos!
Si yo cambiara mi manera de actuar ante los demás.... los haría felices.
Si yo aceptara a todos como son.... sufriría menos.
Si yo deseara siempre el bienestar de los demás.... sería feliz.
Si yo criticara menos y amara más.... cuántos amigos ganaría.
Si yo comprendiera plenamente mis errores y defectos y tratara de cambiarlos.... cuánto mejoraría mi hogar y mis ambientes!
Si yo cambiara el tener más por el ser más.... sería mejor persona.
Si yo cambiara de ser Yo, a ser Nosotros.... comenzaría la civilización del Amor.
Si yo cambiara los ídolos: poder, dinero, sexo, ambición, egoísmo y vanidad definitivamente por: Libertad, Bondad, Verdad, Justicia, Compasión, Belleza y Amor.... comenzaría a vivir la verdadera felicidad.
Si yo cambiara el querer dominar a los demás por el autodominio.... aprendería a amar en libertad.
Si yo dejara de mirar lo que hacen los demás...tendría más tiempo para hacer más cosas.
Si yo cambiara el fijarme cuánto dan los otros para ver cuánto más puedo dar yo.... erradicaría de mí la avaricia y conocería la abundancia.
Si yo cambiara el creer que sé todo.... me daría la posibilidad de aprender más.
Si yo cambiara el identificarme con mis posesiones como títulos, dinero, status, posición familiar.... me daría cuenta que lo más importante de mí es que Yo Soy un Ser de Amor.
Si yo cambiara todos mis miedos por Amor.... sería definitivamente libre.
Si yo cambiara el competir con los otros por el competir conmigo mismo.... sería cada vez mejor.
Si yo dejara de envidiar lo ajeno.... usaría todas mis energías para lograr lo mío.
Si yo cambiara el querer colgarme de lo que hacen otros por el desarrollar mi propia creatividad.... haría cosas maravillosas.
Si yo cambiara el esperar cosas de los demás.... no esperaría nada y recibiría como regalo todo lo que me dan.
Si yo amara el mundo.... lo cambiaría.

Si yo cambiara.... cambiaría el mundo !

Como elegir un compañero para una relación de toda la vida

CÓMO ELEGIR UN COMPAÑERO PARA UNA RELACIÓN DE TODA LA VIDA

POR CLARISSA PINKOLA ESTÉS (Completo).



re-1-
1- Elige a alguien como si fueras ciego. Cierra los ojos y observa qué PUEDES sentir de esa persona, de su gentileza, su lealtad, su comprensión, su devoción, su habilidad para ocuparse de ti, su habilidad para cuidar de sí mismo como un ser independiente. En nuestra cultura nos basamos mucho en lo que vemos con nuestros ojos externos. Pero cuando miramos al objeto de nuestro amor, es mucho más importante lo que vemos con los ojos cerrados.
2- Elige a alguien que tenga la habilidad de aprender. Si hay algo que verdaderamente hace diferencia entre un amante para toda la vida y uno fugaz, es una persona que tenga la habilidad de aprender. Dice el refrán “el ignorante es poco tolerante”. Aquellos que no pueden aprender cosas nuevas, ver las cosas a la luz de lo NUEVO, ser curiosos acerca del mundo y de cómo funcionan las cosas o las personas, a menudo se cierran y dicen. “No, esto tiene que ser así, de este modo” y para una relación de toda la vida es mejor estar con alguien que se abra y se cierre aprendiendo y evolucionando.
3- Elige a alguien que quiera ser como tú, fuerte y sensible a la vez. Para no confundir el significado de estas palabras, no relacionarlas con la rigidez y la fragilidad. La fuerza en el sentido en que es fuerte un árbol: pueden soplar fuertes vientos pero se sostendrá porque es flexible y se moverá para adelante y para atrás con el viento. Y en cuando a la sensibilidad, estoy hablando de ver, estar alerta a las cosas que están alrededor de uno. Algunas personas pueden necesitar una pequeña ayuda en esto, pero a menudo en algún en algún lugar profundo en su mente, o en su corazón, ya están despiertos y alerta a todas estas cosas, si bien no saben cómo articularlas. Y es por eso que el NÚMERO 2 es tan importante: la habilidad para aprender. Puedes tener todas las posibilidades, todas las potencialidades del mundo para ser amable, amoroso, devoto, bueno y el mejor amante conocido del género humano pero si no puedes aprender a desarrollar ese potencial. ¡Entonces no sirve de nada!
4- Elige a alguien que cuando lo hieras, sienta dolor y te lo muestre. Y viceversa… elige a alguien que cuando te hiera, vea tu dolor y lo REGISTRE. Esto es muy importante. Hay muchos modos en que la gente muestra el dolor. A veces reclamando es una de las cosas que hacen las personas más extrovertidas. Reclaman, se vuelven locos… pero es su propia expresión de dolor. Lo peor es cuando le haces a tu compañero algo que no es amable, o que es impensado y él no muestra reacción. Como si no se permitiera a sí mismo mostrarse verdaderamente humano en tu presencia. Pasamos por muchas relaciones o unas cuantas, antes de encontrar a alguien con quien querríamos pasar nuestra vida. Sentimos las heridas en tantas relaciones que empezaban con grandes esperanzas pero que terminaban con fallas y accidentes. Por otro lado, te vas a encontrar con otro que no está intacto, que también está herido de algún modo. Como resultado de esto es que la habilidad de tu compañero de mostrar su dolor es tan importante como su habilidad para percibir tu dolor. ¡Es muy importante! Porque por naturaleza de las relaciones hay momentos de tensión en que presionamos o hicimos algo que lastimó al otro y esto no puede ser evitado completamente, pero no debe ser la misma herida una y otra vez. La gente tiene que aprender cada vez. Puede que alguien haya acumulado enojo y sufrimiento, heridas de los amantes anteriores, y haya adquirido así la habilidad de herir al nuevo amante y hasta ser desbordado por el deseo de herirlo. Entonces debe ser capaz de parar, de detenerse cuando ve el dolor en la otra persona.
5- Elige a una persona que tenga una vida interior. Trabajando, dibujando, escribiendo, a través de la meditación, la religión, algo que ame. Elige a una persona que esté en VIAJE y te vea como a un compañero de camino, un compañero de viaje. La habilidad para estar completamente con el otro y al mismo tiempo enteramente separado es muy importante. Las relaciones son cíclicas y hay momentos para estar muy cerca el uno del otro y otros momentos para apartarse.
6- Elige a alguien que tenga pasiones similares a las tuyas en la vida. Una relación construye una memoria. Estas memorias, lo compartido, son el “pegamento” lo que une la relación. Por el placer que es recordar buenos tiempos juntos, pero también los tiempos duros. Si no hay nada que verdaderamente disfruten juntos, es muy difícil pasar estos tiempos con el otro. Aun cuando cada uno PUEDA ser muy distinto del otro y hacer cosas muy diferentes, tiene que haber algo, algo tan simple como descansar juntos en la bañera o secarse juntos el pelo al sol, o dar vuelta a la manzana cada noche, o cualquier cosa de estas muy simple… sé que estarás pensando, cepillarse juntos los dientes a la mañana… Si, poco más que esto.
7- Elige a alguien que tenga valores similares En cuanto a tener hijos, al nacimiento de los niños, la familia, roles de hombres y mujeres y las ideas acerca del dinero y la religión. Tal vez todas estas cosas juntas son el ideal y no las puedas encontrar todas sobre todo al principio de la relación, pero puedes tener esto en CUENTA. Elegir a alguien que tenga valores similares tiene que ver con disminuir las fricciones en la relación y estas cosas deben sintonizarse si ha verdadero compromiso. Esta sintonía debe darse también en un nivel pragmático y cuando se da en estos niveles prácticos en más fácil que pueda darse en otros niveles más sutiles.
8- Elige a alguien compasivo, a alguien que sea capaz de escuchar, a alguien que te dé tiempo. Particularmente si eres una persona impulsiva, al tener un compañero que no sea tan impulsivo como tú, eventualmente hallarás cierta lentitud que será buena para ti. También alguien que sea un poco lento, al estar con un compañero que sea bien distinto se acelerará un poco. Y podrán después de un tiempo hallar un ritmo propio de la relación. A veces las personas tienen que estar ocho o nueve años hasta tener este ritmo completamente desarrollado. Lleva tiempo construir un milagro… no un milagro porque estén juntos sino por la fuerza que hay en el centro de una relación por la profunda guía del amor.
9- Elige a alguien que se PUEDA reír de sí mismo. Poder hacer un chiste y reír de la situación y de sí mismo es muy importante. Pero supongamos que no tienes un compañero muy chistoso, elige a alguien que pueda parar una discusión y aprender a reírse de la situación (vuelve al punto 2, alguien que tenga habilidad PARAaprender)
10- Elige a alguien a quien puedas tolerarle las fallas y características. En los momentos de tensión y cansancio, las cosas que más te atraerían de un compañero, las cosas más encantadoras, serían las que después te volvería loca… Así que no pienses que podrías vivir con alguien que TIENE cosas que realmente molesta a las otras personas y que para ti no son importantes porque él o ella las está haciendo y él o ella es tu amante. Hay algunas cosas que son intolerables en cualquier relación sea el matrimonio o las sociedades y los negocios. Tales como el alcoholismo, el abuso sexual, el juego, las ACTIVIDADES criminales, Una persona que no dice la verdad, una persona que no te puede mirar a la cara, una persona por la que no podrías dar fe, una persona que puede hacer cualquier cosa por tapar sus errores. Todo eso sería construir una relación en un terreno inseguro.
11- Ser amigos y no-solo amantes. Y no es solo que digas “si yo sé lo que eso significa, significa que me guste y que lo ame” Significa más que eso y un modo de juzgarlo es pensar. ¿Harías por tu pareja lo que estás dispuesta a hacer por tu mejor amigo? ¿Estás dispuesta a escucharlo, estás dispuesta a hablar de las cosas de las que él tiene ganas de hablar, a prestar atención a los detalles de lo que dice o tiene ganas de hacer? Esto no significa que tengan que estar cuidándose el uno al otro siempre y para siempre, pero sobre ciertas bases y en algunos detalles por cierto que deben hacerlo. Entonces cuando pienses en lo que harías por tu mejor amigo y en lo que harías por tu amante, las cosas se aclararán para ti.
12- Elije a alguien que haga tu vida más grande y no más pequeña.
Clarissa Pinkola Estés


fuente: Facebook  Palabra Chamánica Espacio Creativo