jueves, 25 de junio de 2015

Las ratas están ahí

Las ratas están ahí

El piloto emprendió su misión de combate durante la guerra. Al cruzar el océano ocurrió uno de esos sucesos extraños y escalofriantes, oyó crujidos en el respaldo de su asiento. No podía moverse y tampoco regresar. Se quedó inmóvil. Los ruidos cesaron en su espalda y comenzó a sentir que algo se movía cerca de su equipaje, en el piso. Eran ratas. Estaban ahí y podían devorar cualquier cosa.

Sacó el arma en un acto reflejo, pero era imposible disparar dentro de la cabina. Ideó un plan, comenzó a tomar altura, más y más.
Sin perder el rumbo, sabía que la diferencia de presión podía ser un arma letal. Las ratas no resisten vivir en la altura.
En nuestra vida, desde muy pequeños, estamos sometidos al rigor de la necesidad de aprobación. Su contracara, la crítica, suele paralizar, desmoralizar, debilita el entusiasmo y la propia confianza. Así fuimos educados y por esto evitamos las críticas con perseverancia y sin éxito. Ellas, como las ratas, siempre estarán ahí, a nuestras espaldas o en el frente.
Casi todas las personas prefieren ser arruinadas por los halagos que impulsadas por las críticas.
Por eso, como el piloto, tenemos la opción de mantener el rumbo y subir un poco más.

miércoles, 17 de junio de 2015

10 Razones para volver a empezar

10 Razones para volver a empezar

  1. HOY DECIDO SER AUTÉNTICO: Renuncio a la hipocresía.
  2. HOY DECIDO CRECER EN MI VIDA INTERIOR: Renuncio a la cultura "light".
  3. HOY DECIDO DISFRUTAR DE MI VIDA: Renuncio a la culpa falsa.
  4. HOY DECIDO RESPETARME UN POCO MÁS: Renuncio a la autoagresión.
  5. HOY DECIDO PERDONAR A LOS QUE ME DAÑARON: Renuncio al rencor y el resentimiento.
  6. HOY DECIDO BENDECIR A LOS QUE ME RODEAN: Renuncio a las maldiciones.
  7. HOY DECIDO COMPARTIR LO QUE TENGO: Renuncio al egoísmo.
  8. HOY DECIDO CONFIAR MÁS EN DIOS: Renuncio a la magia, a la brujería, al esoterismo.
  9. HOY DECIDO VIVIR LA VIDA QUE DIOS ME REGALÓ: Renuncio a los miedos y a la muerte.
  10. HOY DECIDO "VOLVER A EMPEZAR": Renuncio a permanecer caído.

domingo, 14 de junio de 2015

Características de las personas mentalmente fuertes


En general, estas personas son mentalmente fuertes y emocionalmente inteligentes, en pensamientos, comportamientos y formas que ellos establecen para el éxito en la vida. 25 signos que muestran que puedes tener nervios de acero.

1. Evitas los conflictos

La verdadera marca de la madurez es cuando alguien te hace daño e intentas comprender su situación en lugar de tratar de devolverles el daño. Sostener rencores nunca ha sido una solución a los problemas, y nadie ha logrado nada con eso. En vez de gastar tú tiempo odiando a las personas que te hacen daño, decides dejar de lado el dolor y aprender del incidente. Incluso en los factores de estrés más severos, puedes mantener la calma y tratar de manejar situaciones de problemas. Considera que el aumento de tu voz es un signo de debilidad.

2. No juzgas o envidias

Nunca haces suposiciones sin estar primero plenamente consciente de la situación. Evitas creer en las cosas negativas que te digan y no te molestas del éxito de otras personas. Puedes celebrar el éxito de otras personas y tratas de no ponerte celoso cuando alguien es mejor que tú en un área en particular. Sabes que el éxito viene con el trabajo duro y que debes estar dispuesto a trabajar duro para alcanzarlo.

3. Estas abierto a recibir la ayuda de otros

No estas atrapado por el ego. No temes pedir ayuda si la necesitas. Estás seguro de admitir que no sabes todo y te abrirás a pedir ayuda con el fin de aprender.

4. Te disculpas cuando es necesario

No te es problema disculparte por haber dicho o hecho algo mal. No tienes miedo de admitir tus propios errores y estás dispuesto a sufrir las consecuencias de ellos. Eso te hace ser un humano responsable y honesto.

5. Estás abierto a las opiniones de otras personas

Manejas diferentes opiniones fácilmente- no las rechazas porque creer lo contrario de lo que tu sabes puede ser cierto para alguien más. Abrazas la diversidad y estás listo para escuchar lo que todo el mundo tiene que decir.

6. Eres desinteresado

Te encanta ayudar a los demás y no esperas nada a cambio cuando haces algo bueno para un amigo. Ya sabes que una vela no pierde nada encendiendo otra vela.

7. Sabes que no siempre se puede complacer a todo el mundo

A pesar de que eres una persona amable y un ser genuino, eres consciente de que no siempre se puede hacer a todos felices. Sabes que pasar el tiempo contigo mismo es tan importante como contener una buena relación con las personas que te rodean, pero estas dispuesto a decir “no” cuando alguien intenta robar tu tiempo.

8. Sabes que el mundo no te debe nada

No te sientes con derecho a cosas de la vida. Estas dispuesto a trabajar duro para alcanzar tus metas y sabes que el mundo se forma por lo que haces ahora. No tomas nada por sentado y estas agradecido por lo que tienes.

9. Aceptas el cambio

No tratas de evitar el cambio y entiendes que es inevitable. Le das la bienvenida al cambio positivo y estás dispuesto a ser flexible porque crees en tus capacidades de adaptación.

10. Sigues a tu corazón

Crees que no se puede ir mal al seguir tu corazón y los instintos. Entiendes que al hacer eso, estas ayudando al crecimiento de tu alma y que nunca te lamentas por seguir tu corazón.

11. Te perdonas a ti mismo

Sabes que el estar enojado contigo mismo no te va a llevar muy lejos. En su lugar, estas dispuesto a perdonarte a ti mismo y al hacerlo eres capaz de aprender.
Dejar el pasado donde pertenece en lugar de insistir, es la clave seguir adelante y avanzar.

12. Eres financieramente responsable

Eres un ser humano responsable y sabes que gastar tu dinero tontamente puede dañar tu futuro.

13. Crees que la persistencia da sus frutos

Tienes metas y nada te puede distraer de trabajar en ellas. Aunque es posible que hayas fallado varias veces, no ves el fracaso como una razón para darse por vencido. Al contrario utilizas el fracaso como una oportunidad para crecer más fuerte y mejorar. Encuentras maneras de evitar cualquier obstáculo. Renunciar no es lo tuyo, pero lo es buscar alternativas.

14. Auto-mejorar es una forma de vida

Sabes que la vida se trata de aprender cosas nuevas y que vives tu vida siempre tratando de mejorarte a ti mismo si se trata de trabajo, salud o cualquier otra área de tu vida. Estás de acuerdo que si una persona detiene su aprendizaje, está muerta.

15. Tomas cuidado de tu cuerpo y mente

No se puede tener una mente sana sin un cuerpo sano. Sabes que, al mantener una vida equilibrada, eres capaz de crecer más fuerte y ser la mejor versión de ti mismo. Tu cuerpo es tu mente.

16. Estas dispuesto a alejarte de tu zona de confort

Crees que la zona de confort no es un buen lugar para estar pegado porque nada crece allí, así que intentas ponerte a prueba a diario y tomar riesgos calculados.

17. No pierdes energía en cosas que no puedes controlar

Sabes que a veces la única cosa que puedes controlar es tu actitud hacia los acontecimientos en tu vida. Perder la energía en cosas que no puedes controlar es algo que no te conviene y sabes que culpar a algo que está más allá de tu control es inútil y tonto.

18. Utilizas tu tiempo sabiamente

Valoras tu tiempo y crees que, matar el tiempo, en realidad te mata a ti. Luchas contra la dilación y decides pasar tu tiempo de manera productiva.

19. Manejas la crisis con calma

Mantienes tus pensamientos claros y tranquilos durante una crisis. Los buenos resultados resultan cuando se hacen con una mente tranquila y en paz.

20. No eres co-dependiente

No dependes de otros para hacer tu trabajo y, al hacerlo, mantienes una relación sana tanto personal como profesionalmente.

21. Sabes que eres responsable desarrollando tu vida

Crees que tu propia felicidad y el éxito es un subproducto de tus propios pensamientos, creencias, actitudes, carácter y comportamiento.

22. Sabes que la gratitud es el mejor ajuste de actitud

Mientras más bondad veas, más se crea, y también motivos para sonreír. La felicidad no se inicia cuando “esto, aquello o lo otro” se resuelve. La felicidad es lo que ocurre ahora, cuando aprecias lo que tienes.

23. Sabes que no tienes que ser perfecto

Crees que cuando pasas demasiado tiempo concentrándote en la percepción que los demás tienen de ti, o en lo que todo el mundo quiere que seas, en algún momento olvidas quién eres en realidad. Así que no temes a juicios de otras personas porque sabes que lo que hay en tu corazón es lo que realmente eres y no te avergüenza mostrar tu verdadero rostro al mundo.

24. Sabes quién eres

Estas en paz contigo mismo y eres consciente de lo que quieres lograr. Tienes ciertos límites que has establecido para ti mismo y los has abrazado porque sabes bien que eso es lo que eres.

25. Esperas menos y aprendes más

Aunque las cosas no siempre salen como las has planeado, te has dado cuenta de que esto es de lo que se trata la vida. No siempre se obtiene lo que has querido y eso es una buena cosa porque se aprende de esta experiencia y sigues adelante.

Los hijos son como navíos



  
Los padres piensan que serán el puerto más seguro de los hijos, pero no deben olvidarse que deben prepararlos para navegar mar adentro.

Al mirar un navío en el puerto imaginamos que está en el lugar más seguro, protegido por un muelle y un ancla que lo mantiene inmóvil, ayudado por las amarras.
Sin embargo sabemos que está allí preparándose, abasteciéndose y alistando sus máquinas para ser lanzado al mar cumpliendo con el destino para el que fue creado ,yendo al encuentro de sus propias aventuras y riesgos, dependiendo de la fuerza que le reserva la naturaleza y le obligue a desviar la ruta, trazar otros caminos y buscar nuevos puertos.
Pero retornará con el conocimiento adquirido, enriquecido por las diferentes culturas y sumarse a la gente que lo espera feliz en el puerto.
Así son los hijos tienen a sus padres en puerto seguro hasta que se tornan independientes y por mas seguridad, protección y mantenimiento que pueden encontrar junto a ellos, nacieron para surcar los mares de la vida, correr sus propios riesgos y vivir sus propias aventuras.
Llevando consigo el equipaje de los ejemplos que recibieron y los conocimientos que adquirieron en el período de su educación, pero lo más importante estará en el interior de cada uno.
La capacidad de saber ser feliz.
Sabemos que no existe la felicidad inmediata, que no es algo que se guarda en un escondite para luego ser transmitida a alguien. El lugar más seguro para el navío es el puerto, pero no fue construido para permanecer allí.
Los padres piensan que serán el puerto más seguro de los hijos, pero no deben olvidarse que deben prepararlos para navegar mar adentro y encontrar su propio lugar donde se sientan seguros con la certeza de que deberán ser, en otro tiempo, el puerto para los nietos de sus padres y comenzar, una vez más, el ciclo que impone la vida.
Los padres no podrán trazar el destino de los hijos, pero lo que sí pueden hacer es procurar que tomen conciencia de los valores que adquirieron: humildad, solidaridad, honestidad, disciplina, gratitud y generosidad.
Los hijos nacen de los padres pero deben convertirse en ciudadanos del mundo y si bien quisieran ver siempre una sonrisa en su rostro, no pueden sonreír por ellos, pueden desear su felicidad, pero no pueden ser felices por ellos.
La felicidad consiste en tener un ideal para buscar y la seguridad de hacer todo lo necesario para lograrlo.
Los padres no deben ir tras los pasos de los hijos y los hijos no deben ubicarse en los que sus padres alcanzaron , sino que deben seguir desde el puerto al que ellos llegaron y partir, como los grandes buques, en búsqueda de sus propias conquistas y aventuras en la seguridad de que lo van a lograr con la base de lo que les enseñaron en su formación.
Qué difícil es soltar las amarras para dejar que el navío parta !

Sin embargo el regalo más grande de amor que pueden dar los padres a sus hijos es su propia autonomía, y con ello la seguridad de que nunca los olvidarán, que siempre estarán a su lado cuando los necesiten.

sábado, 6 de junio de 2015

8 hábitos de la gente altamente efectiva

Según Covey, nuestros paradigmas afectan la forma en cómo interactuamos con los demás, lo cual en respuesta afecta cómo los otros interactúan con nosotros.

 
Por Dr. Stephen R. Covey 
El modelo del Seven Habits (Siete Hábitos) de Stephen Covey de la gestión y del liderazgo es una teoría que es aplicable a nuestra vida personal, a nuestra vida social y a nuestra vida laboral.
Sin embargo el marco de los Siete Hábitos es altamente aplicable para líderes y gerentes.
Según Covey, nuestros paradigmas afectan la forma en cómo interactuamos con los demás, lo cual en respuesta afecta cómo los otros interactúan con nosotros.
Por lo tanto Covey discute que cualquier programa eficaz del esfuerzo personal deba comenzar con “de adentro hacia afuera” un acercamiento, más bien que observando hacia nuestros problemas como “estando hacia fuera allí” (de afuera hacia adentro un acercamiento). Debemos comenzar con examinar nuestro propio carácter, paradigmas, y motivos.

Primer Hábito: Ser proactivo

La proactividad se refiere a que ante cada estímulo del medio ambiente tenemos la habilidad de decidir la respuesta que queremos dar, esto quiere decir que no somos esclavos de las acciones que sobre nosotros se efectúan, sino libres ejecutores de nuestra conducta. Un ejemplo práctico en nuestra vida es el de un chofer de un automóvil que nos grita una obscenidad o nos toca con insistencia la corneta. En este caso nuestra respuesta puede variar desde tomar un arma y dispararle para luego sufrir las consecuencias legales de nuestra conducta hasta simplemente ignorarlo y no dejar que altere nuestra tranquilidad.
Lo importante es que la decisión es nuestra, que somos los responsables de nuestra conducta.

Segundo Hábito: Empiece con un fin en mente

Este hábito consiste en que nuestra conducta no la debe regir el capricho ni el azar, debemos tener objetivos precisos a los cuales acercarnos: Un título universitario, comprar una casa o un carro, mantener una relación armoniosa con nuestros familiares y compañeros de trabajo. Cada vez que tomemos una decisión importante debemos decidir si ésta nos acerca o nos aleja de nuestros objetivos.

Tercer Hábito: Establezca primero lo primero

El capitulo comienza un una frase del sabio alemán Goethe: " Lo que importa más nunca debe estar a merced de lo que importa menos". Consiste en distribuir nuestro tiempo sobre la base de prioridades: El autor describe un método de organizar el tiempo sobre la base de cuatro cuadrantes en los cuales coloca las actividades: urgentes, no urgentes, importantes y no importantes.

Cuarto Hábito: Pensar en Ganar-Ganar

Este hábito indica que nuestras interacciones con otros seres humanos siempre deben ser de mutuo beneficio, que no existe otra opción. Nuestra relación con un cliente debe ser ganar-ganar, si yo gano y mi cliente pierde, pierdo al cliente. No existe otra opción, aunque a corto plazo otros tipos de relaciones resulten en ganancias inmediatas, a largo plazo vemos que son ineficaces y perjudiciales para ambas partes. El autor explica que si después de razonar con nuestro interlocutor no logramos un acuerdo ganar-ganar, nos queda la opción de "no hay trato".

Quinto Hábito: Procure primero comprender y después ser comprendido

Este hábito trata de ponerse primero en el lugar del otro, de ver las cosas desde su punto de vista. Se basa en el refrán popular de " Todo es del color del cristal con que se mire". Es quizás el más difícil de practicar, casi siempre pasamos más tiempo hablando que escuchando y creemos que las cosas sólo pueden ser de la manera en que nosotros las vemos.

Sexto Hábito: La sinergia

Algunas metas las podemos lograr solos, pero las empresas grandes sólo las podemos lograr con trabajo en equipo. Proyectos como la llegada del hombre a la Luna o la fabricación de la Bomba Atómica son el resultado del trabajo sinérgico.

Séptimo Hábito: Afile la sierra

Este capítulo comienza con la historia de un leñador que se encuentra tan inmerso en su trabajo de derribar árboles que olvida que dedicar unos minutos a afilar su sierra le haría ahorrar muchas horas de esfuerzo. Aplicado a nuestra vida afilar la sierra se refiere a dedicar un breve espacio de nuestra vida a mejorar nuestras condiciones físicas e intelectuales mediante el ejercicio físico y el estudio
En su libro 2004: “El 8vo hábito: From Effectiveness to Greatness”, Covey introduce un octavo hábito adicional:

Octavo Hábito: Encuentre su propia voz y haga que su voz inspire a otros para que encuentren la suya.

Animar hacia la “grandeza”, significa actuar con integridad como individuo y ayudar a otros para que hagan lo mismo. Según Covey, este hábito representa la 3ra dimensión de su modelo.
La grandeza es el traslape de:
  • Grandeza personal
    Aplicación de los 7 hábitos en las formas de: visión, disciplina, pasión y conciencia.
  • Grandeza de Liderazgo
    Aplicando los 4 papeles del liderazgo, que están modelando los 7 hábitos: Encontrar la trayectoria. Creando el modelo. Alineamiento. Crear un sistema de trabajo técnicamente impecable. Empoderamiento. Liberar el talento, la energía, y la contribución de la gente. Dar el ejemplo. Para construir confianza en otros. Es el corazón del liderazgo eficaz.
  • Grandeza organizacional
    Ésta es grandeza convertida en una visión, una misión y unos valores. Esto trae la claridad, compromiso, difusión, sinergia, y permite la confiabilidad.
El Dr. Stephen R. Covey (n. el 24 octubre, 1932 Salt Lake City, Utah Estados Unidos), es más conocido por ser el autor del libro de mejor venta: Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva.
Covey reside con su esposa Sandra, y su familia in Provo, Utah, que es en donde se encuentra La Universidad Brigham Young University que es precisamente donde el Dr. Covey enseñó antes de la publicación de su prestigioso libro. Stephen Covey además es padre y abuelo, tiene nueve hijos y cuenta con cuarenta y siete nietos; él ha recibido el premio de Paternidad del «National Fatherhood Initiative», (la iniciativa national de paternidad) en el año 2003.

Seis ideas para ser más felices




  
Científicos de la Clínica Mayo, en Estados Unidos, armaron una guía que de seguirla, afirman, nos haría más satisfechas y hasta dormiríamos mejor. Consejos para promover la gratitud.

Ser agradecido tiene su premio. Quienes del gracias no hacen una mera cuestión formal, si no un estilo de vida son más felices, mantienen relaciones más positivas con su entorno, sienten mayor satisfacción y hasta duermen mejor.

No se trata sólo del agradecer cuando se recibe un regalo, una ayuda o un servicio. El concepto de gratitud que redunda en mayor sensación de bienestar es mucho más amplio y “se enfoca en notar y apreciar los aspectos positivos de la vida”, aún cuando esta tenga imperfecciones, según un reciente artículo de la Mayo Clinic Health Letter, una publicación de la Clínica Mayo, de Estados Unidos.

La publicación se centra en las conclusiones del trabajo de Amit Sood, profesor de Medicina del centro de Rochester, Minnesota, y autor de varios libros dedicados a dar pautas sobre cómo entrenar al cerebro para disminuir el estrés, mejorar la resiliencia (la capacidad de las personas para sobreponerse a momentos dolorosos y situaciones adversas) y vivir en forma positiva.

Sood que, entre otras publicaciones es autor de la Guía para vivir libre de estrés, da algunas sugerencias para promover y practicar la gratitud a diario:

1- Empezar el día agradeciendo: Arrancar la jornada pensando en cinco personas por quienes siente gratitud. Se inicia de un modo más positivo cuando uno empieza con pensamientos de gratitud.

2- Agradecer por cosas simples: Prestar más atención a cosas que uno da por sentadas como la electricidad, el agua potable, la ropa limpia y una taza de café.

3- Buscar lo positivo en lo negativo: Ver los problemas como fuerzas necesarias y enfocarse en lo realmente importante. Agradecer por tener una mente flexible que le permite aprender de las adversidades y crecer como persona.

4- Reconocer las riquezas propias: Cuando se sienta triste, concéntrese en las cosas buenas que tenga, como su salud, su casa, su libertad, un trabajo y seres queridos.

5- Llevar un diario sobre la gratitud: Anotar las personas y las cosas por las que siente agradecimiento antes de dormir, para que los últimos pensamientos antes del descanso sean positivos. Cuando tenga un día complicado, revise el diario.

6- Agradecer: Exprese su agradecimiento a los demás con palabras y acciones, en forma personal o por mensaje.

Amor en el Corazón




En una de salas de un colegio, habían varios niños, cuando uno de ellos preguntó a la maestra: "Maestra, ¿qué es el amor?"
La maestra sintió que el niño merecía una respuesta a la altura de la pregunta inteligente que había hecho.
Como estaban en hora de recreo, pidió a cada alumno que dieran una vuelta por el patio de la escuela y trajesen lo que más les despertara en ellos el sentimiento del amor.
Los chicos salieron apresurados y... cuando volvieron la maestra les dijo:
Quiero que cada uno muestre lo que trajo consigo.
El primero dijo: -Yo traje esta flor, ¿no es linda?
El segundo habló: -Yo traje esta mariposa, vea el colorido de sus alas, la voy a colocar en mi colección.
El tercero completó: -Yo traje este pichón de pajarito. Se cayó del nido junto con otro hermano, ¿no es gracioso?
Y así los chicos uno a uno, fueron colocando lo que habían recogido en el patio. Terminada la exposición, la maestra notó que había una alumna que no había traído nada y que se había quedado quieta todo el tiempo, ella estaba avergonzada, pues nada había traído.
La maestra se dirigió a ella y le preguntó: -Muy bien, ¿y tú por qué no has traído nada? Y la niña le respondió tímidamente: -Vi la flor y sentí su perfume, pensé en arrancarla, pero preferí dejarla para que su perfume exhale por más tiempo. Vi también la mariposa, suave, colorida, ella parecía tan feliz que no tuve el coraje de aprisionarla. Vi también el pichoncito caído entre las hojas, pero.... al subir al árbol noté el mirar triste de su madre y preferí devolverle al nido. Por lo tanto maestra, traigo conmigo el perfume de la flor, la sensación de libertad de la mariposa, y la gratitud que sentí en los ojos de la madre del pajarito.
-¿Como puedo mostrar lo que traje?

La maestra agradeció a la alumna y le dió la nota máxima... Sólo podemos traer el amor en el corazón.